"Atravesaron la galería cubierta del arco del Arzobispo y entraron en el claustro alto, llamado Las Claverías: cuatro pórticos iguales en longitud a los del claustro bajo, pero desnudos de toda decoración y con un aspecto mísero.(...) El claustro, con sus pórticos bajos, ofrecía el aspecto de cuatro calles, cada una de las cuales sólo tenía una fila de casas. Enfrente estaba la chata columnata sobre cuyas barandillas asomaban sus copas puntiagudas los cipreses del jardín. Por encima del tejado del claustro veíanse las ventanas de la segunda fila de habitaciones, pues casi todas las casas de las Claverías tenías dos pisos.
Era un pueblo que vivía sobre la catedral al nivel de los tejados, y al llegar la noche y cerrarse la escalera de la torre quedaba aislado de la ciudad. La tribu semieclesiástica se procreaba y moría en el corazón de Toledo, sin bajar a sus calles, adherida por tradicional instinto a aquella montaña de piedra blanca y calada, cuyos arcos la servían de refugio. Vivía saturada del olor a incienso y respiraba el perfume especial de moho y hierro viejo de las catedrales, sin más horizonte que las ojivas de enfrente o el campanario, que aplastaba con su mole un pedazo del cielo que se veía desde el claustro alto."
Vicente Blasco Ibáñez. "La catedral" (1903)
Hola. Enhorabuena por este blog y por este post. Leyendo "La catedral", de V. Blasco Ibáñez, lectura que debe hacerse por cierto muy despacito, me he prendado de la descripción de la catedral y en especial de las Claverías.
ResponderEliminarGracias por esas magníficas fotos. Superan mi imaginación. Seguiré este blog. Soy Teresa. Tengo un intento de blog sobre literatura: losdosmundos.com
Claverias...encantada de conhece-la
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